Que la Movilidad y la Sostenibilidad deben ser compatibles es ya un hecho incontestable. Somos millones de personas las que hoy en día nos desplazamos continuamente por necesidad o placer y renunciar a ello sería impensable. Pero a la vez es completamente cierto que esto ha generado un impacto medioambiental que daña a los ecosistemas, y que compromete la vida del Planeta, y la nuestra propia.
Ya estamos pagando las consecuencias en diversas formas, y de manera muy concreta con enfermedades y fallecimientos prematuros. Por eso creo que ni siquiera podemos ya hacernos la pregunta de si Movilidad y Sostenibilidad son compatibles, sino que debemos trabajar y de modo urgente en que así sea.
Las ciudades y las empresas a nivel teórico están indudablemente alineadas con la necesidad de avanzar en la buena dirección, pero la realidad es que hay muchas resistencias por parte de ambas, porque implementar medidas concretas significa realizar inversiones económicas y cambios que no siempre se está dispuesto a acometer, por esa visión cortoplacista con la que se mueven los políticos y las grandes estructuras económicas.
Para cambiar esto, se necesitan dos cosas:
Por un lado implicar a los ciudadanos para que sean conscientes de la imperiosa necesidad de construir un mundo más sostenible en general, algo que está bastante asumido, y específicamente unas ciudades más sostenibles, lo que siendo verdad que también está asumido en un plano teórico, no se entiende bien lo que significa, ni los cambios de hábitos y de conducta que eso implica.
Desde el punto de vista de la movilidad en las ciudades, deberíamos llegar a aplicar los siguientes conceptos: lo que puedas hacer caminando, no cojas una bicicleta. Lo que puedas hacer en bicicleta, no uses un patinete ni bicicleta eléctrica. Lo que puedas hacer en bicicleta/patinete eléctrico , no utilices una moto eléctrica. Lo que puedas hacer en una moto eléctrica, no te subas a un coche eléctrico… Y por supuesto utilizar medios de transporte urbanos sostenibles y compartir vehículo siempre que se pueda.
Pues bien, la mejor herramienta que tenemos a nuestra disposición para informar, formar, convencer, presionar, emocionar y mover a la acción, es sin duda el audiovisual. Somos seres imitantes. Si los ejemplos que vemos a través de las pantallas de cine, tv, ordenadores, tablets, móviles… son negativos, la sociedad vira en negativo. Si los ejemplos son positivos, la sociedad vira en positivo. Necesitamos mostrar historias de personas, empresas, instituciones, que sean inspiradoras para todos nosotros, que nos muestren el camino a seguir, que nos permitan dejar de ver la sostenibilidad como un snobismo, ni un problema, ni un freno, sino verlo además de como una necesidad para el Planeta y nuestra supervivencia como especie, como una gran oportunidad de progreso, de generar igualdad, justicia social, empleo de calidad… Entender en definitiva que la “Sostenibilidad es el único camino posible”.
Miguel Ángel Tobías
Productor y Director de Proyectos Audiovisuales Sostenibles